TERRIER AUSTRALIANO
Los ingleses acostumbraban llevar consigo a sus mascotas, cuando se dirigían a alguna de las colonias de la Reina, en este caso Australia, por lo que fue imposible evitar que sus perros se cruzaran con otras razas, como el Cairn, el Dandie Dinmont y el minúsculo Yorkshire, dando como resultado a los ancestros de este Terrier. La raza apareció en Sydney en 1899, y fue presentada por primera ves en una exposición canina en 1903, así como reconocida por el Kennel Club Ingles, treinta años después.
Respecto a su aspecto general vemos que es compacto, de forma moderadamente baja, con una estructura refinada, pero con suficiente sustancia para sugerir la capacidad para cazar y matar roedores domésticos. Su pelaje es sedoso, liso y partido a la mitad, lo que le confiere una apariencia aseada.
Es un perro vivo, inteligente, afectuoso, valiente y fiel. Se a convertido en uno de los mejores perros para compañía por su gran carácter.
Es un perro de fácil educación, el pelo debe ser cepillado de ves en cuando, pero en general no precisa cuidados frecuentes y se adapta muy bien a la vida de familia.
Todas las tonalidades de azul y fuego son tolerables, cuanto mas intensos sean los colores y definidos mejor. El color de la cola debe ser de azul a muy oscuro; es deseable que el mechón de la cabeza sea azul o leonado. Plata y blanco no son aceptados.
Los machos deben medir de 23 a 26 cm. A la cruz (9 a 10 pulgadas), mientras que las hembras un poco mas baja.
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